Wednesday, March 11, 2009

Los pitufos...

Una vez alguien me dijo:
‘Para qué dedicar espacio a una basura, si puedes usar ese espacio para la recomendación de algo que sí valga la pena? Por qué no te conformas con ignorar lo malo? La indiferencia es la mejor crítica’.
Hasta cierto punto, ha tenido razón. Pero el domingo vi Slumdog Millionaire en este cine que quizá sea el único en México que aún aplica aquello del intermedio.
(Paréntesis: cuando le conté esto a Lafran dijo que a ella no le gustaría para nada porque corta el ritmo de la película. No sé, a mí me late esa pausa. Es como ser joven en un cine viejo. Para mí es recordar esos cines donde antes de la peli y en el intermedio, uno bajaba a jugar y a dar marometas. El resto de un Cinema Paraíso).
Bueno, vi la peli: es una verdadera mamada! (yo sé que a algunos cercanos les gustó pero debía decirlo). A menos que les agraden las pelis que se pasean por la pobreza como turistas, ustedes dirán lo contrario. Completamente inmediata, digerible, anecdótica como telenovela. Una peli que medio se compromete pero no tan a fondo para que no le quiten nominaciones ni premios, y que lo toma todo por encima apenas rozando los focos rojos… Y cómo puede una peli empezar con una crítica social y universal como lo jodido de la pobreza para luego aterrizar en una historia de amor tan cursi y con personajes tan clichés (como el malo, ah! el típico guey feo gordo millonario tranza que se la pasa hablando por celular y se acuesta con la virgen guapa sexy y linda)? Me quiero volver chango!
Sólo me gusta una línea cuando después de escenas en la que un par de niños buscan sobrevivir, hablan del Taj Majal y de cómo es considerado patrimonio de la humanidad por la UNESCO. Es una línea pero claro, se relaciona al hecho de 'declarar' cosas para la humanidad cuando lo primero que debía declararse es la misma humanidad.
En fin, todo esto confirma lo que siempre he pensado y es ya una fórmula: cuando la gente habla bien de algo (una peli un libro un candidato, etc…) es porque hay algo mal. No se puede confiar en las modas.
Lo más cabrón de todo esto sigue siendo el poder de los medios. Nos hacen pensar lo que quieran. Nos hacen creer que Slumdog Millionaire es una buena película, con gran denuncia social y gran historia de amor cuando en realidad es una polaroid tomada por un turista católico (tiene mucho qué ver que sea católico) llamado Danny Boyle. Nos hicieron creer que Amores perros fue una gran peli del nuevo cine mexicano (jojojo). Tragamos cualquier mierda cuando se supone que no nos gusta la mierda, cierto?… Los que vieron Slumdog recuerden cuando el protagonista, de niño, debe dejarse caer a un pozo de excremento: esos somos nosotros… la mierda son los medios… y salimos del pozo bañados en mierda pero igual de contentos que el niño de esa peli que, insisto y para redondear, es una verdadera mamada.
También odio a los pitufos y qué...