Ese lugar de nombre de bandera de barco pirata no tenía una sola luz, lo cual indicaba que sí estaba abierto. Lamarz iba porque tenía una cita; yo porque no tenía nada.
El mejor molde de la noche en esta ciudad es una Minerva verde (en su etiqueta dice que es para reyes pero a los villanos también nos gusta -así deberían hacer un eslogan-) y por fortuna -siempre se acaban antes de medianoche-, aún quedaban cuatro.
Triana, promotor cultural director de un noble festival de cine para niños tallerista locutor productor experto en hacer papalotes soltero -por esa noche- y DJ, programaba con cosas que no incluye cuando no es soltero.
Llegó la cita de Lamarz, un titiritero bailador que la hizo mover como a sus muñecos de madera, quizá porque en el fondo Lamarz es una muñeca.
No estoy de humor creo que le dije y me quedé en la barra viendo cómo compartían redundantes señales de apareamiento y cerveza.
Crucé algunas palabras con Triana cuando no tenía puestos sus audífonos y para animarme a pedirle una rola de corazones partidos en dos saqué un CD de Calamaro, de uno de sus estuches, y descubrimos que estaba roto, partido en dos. Uhmm...poético, pensé.
Los pasos de Lamarz me mareaban más que la Minerva, la conversación con Triana repartida en trozos me mantenía encendido en ese lugar oscuro hasta que puso esta rola a la que cambié la letra cuando canté. Y Lamarz siguió bailando -no me ha dicho hasta cuándo y espero le haya ido bien-. Y no quedaban cuatro Minervas verdes sino...perdí la cuenta...pero igual no tenía nada cuando entré. Nada, pero salí a la luz con el cambio en memoria de recuerdos de abril...
El mejor molde de la noche en esta ciudad es una Minerva verde (en su etiqueta dice que es para reyes pero a los villanos también nos gusta -así deberían hacer un eslogan-) y por fortuna -siempre se acaban antes de medianoche-, aún quedaban cuatro.
Triana, promotor cultural director de un noble festival de cine para niños tallerista locutor productor experto en hacer papalotes soltero -por esa noche- y DJ, programaba con cosas que no incluye cuando no es soltero.
Llegó la cita de Lamarz, un titiritero bailador que la hizo mover como a sus muñecos de madera, quizá porque en el fondo Lamarz es una muñeca.
No estoy de humor creo que le dije y me quedé en la barra viendo cómo compartían redundantes señales de apareamiento y cerveza.
Crucé algunas palabras con Triana cuando no tenía puestos sus audífonos y para animarme a pedirle una rola de corazones partidos en dos saqué un CD de Calamaro, de uno de sus estuches, y descubrimos que estaba roto, partido en dos. Uhmm...poético, pensé.
Los pasos de Lamarz me mareaban más que la Minerva, la conversación con Triana repartida en trozos me mantenía encendido en ese lugar oscuro hasta que puso esta rola a la que cambié la letra cuando canté. Y Lamarz siguió bailando -no me ha dicho hasta cuándo y espero le haya ido bien-. Y no quedaban cuatro Minervas verdes sino...perdí la cuenta...pero igual no tenía nada cuando entré. Nada, pero salí a la luz con el cambio en memoria de recuerdos de abril...
Hey honey what you trying to say
as i stand here
don't you walk away
and the world comes tumbling down
hand in hand in a violent life
making love on the edge of a knife
and the world comes tumbling down
and it's hard
for me to say
and it's hard
for me to stay
i'm going down
to be by myself
i'm going back
for the good of my health
and there's one thing
i couldn't do
sacrificarme por tus fantasmas
sacrifice
baby baby i just can't see
just what you mean to me
i take my aim and i fake my words
i'm just your long time curse
and if you walk away
i can't take it
but that's the way that you are
y esas son las cosas que dices
but now you've gone too far
con las cosas que dices
get back to where you come from
i can't help it
under the april skies
under the april sun
under the april skies
sun grows cold
sky gets black
and you broke me up
and now you won't come back
shaking hand, life is dead
and a broken heart
and a screaming head
under the april sky...