Castigan a dos pingüinos gays por robar un huevo
Entre los pingüinos suele ser bastante común que haya parejas homosexuales. Lo que ya no es tan habitual es que estas parejas, ante la imposibilidad de concebir, decidan robar huevos a otras parejas. Esto es lo que ha sucedido en el zoo de Harbin, China.
Tras ser descubierta por su cuidador, la pareja de pingüinos fue encerrada en otro recinto. Y el huevo, devuelto a los ‘padres’, afortunadamente no ha sufrido años, aunque se desconoce si acabará llegando a buen término, pues no es nada sencillo que el polluelo nazca en cautividad.
La pareja castigada forma parte de un grupo de 17 pingüinos que llegaron de la Antártida en 2005 y que se suelen adaptar bien al clima de Harbin, donde en invierno se alcanzan los 40 grados bajo cero.
Debido a que los pingüinos suelen ser animales fieles, que mantienen la pareja durante toda su vida, el zoo ha decidido dejar juntos a los dos machos. (Quizás para después ser azotados y finalmente fusilados).
Ya saben chavos, si son pingüinos gays, no traten de procrear en China.
Nota de último minuto:
En varios puntos de los polos norte y sur la comunidad pingüina gay se manifestó violentamente en contra de estas medidas, exigiendo un trato justo a los pingusexuales involucrados.
El líder de Pingäy AC, actor a quien tal vez recuerden por participaciones en libros como Lost and Found y quien hasta hace unos meses declaró abiertamente su preferencia sexual, alega que los disturbios no se detendrán hasta que el zoológico y la China entera ofrezcan una disculpa a sus compañeros.
Por su parte, el director del zoo declaró que: "A este lugar y al público que aquí trabaja, no nos importa que los pingüinos sean gays... nos importa que roben".
Esta declaración ha abierto un gran debate a nivel mundial, ya que los pingüinos se preguntan si lo que mereció el castigo a los involucrados fue el robo, o sus preferencias sexuales.
"Hemos sido humillados por años y no lo soportaremos más", dijo el líder de la comunidad en la marcha de protesta.
Foto: Boris La Araña Marciana
(Nota en serio: Lean este librillo, está lindo... es como el primer pingüino emo)